Sin los llamados poderes especiales, el oficialismo aseguró que no podrá realizar promociones ni modificaciones de los agentes municipales y que hasta podrá verse afectado el normal funcionamiento del Hospital Municipal Ramón Carrillo.
Las facultades especiales permitirían al Departamento Ejecutivo reasignar fondos de partidas de programas nacionales o provinciales, y también de cuentas municipales, para utilizarlos en necesidades urgentes, como el pago de sueldos o el abastecimiento de alimentos para comedores, reparaciones de camiones, máquinas, etcétera.
Un día antes de la sesión extraordinaria el intendente Di Sabatino envío una carta al presidente del Concejo Deliberante y secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales, Carlos Vergara, en la que explicó las razones por las que resultaba fundamental la aprobación de las facultades especiales.
En esta misiva, el Jefe comunal explicó que las consecuencias de negar las facultades especiales “provocarán serios problemas a la planta de personal del municipio. Se verán afectadas las promociones de los agentes municipales de todas las categorías, las promociones de los agentes de la carrera médica municipal, las designaciones de personal, tanto temporario como de planta permanente, desencadenando en posibles prestaciones sanitarias de baja calidad del hospital Ramón Carrillo y de los Centros de Atención Primaria de la Salud; y todo lo relacionado con modificaciones salariales de cualquier índole y de adecuaciones de recursos humanos por jurisdicción y cargo”.
Y aseguró que “no puedo dejar de observarle que una de las modificaciones genera un beneficio sectorial (casi $ 1.000.000.- para los profesionales médicos) que, aun en el caso que se pretendiera justo, es exclusivo, ya que no beneficia al conjunto de los trabajadores municipales”.