Un operador de cámaras de la policía cordobesa detectó como dos delincuentes aprovecharon la noche para descolgar una importante cantidad de cables en la zona de Rancagua y Rauch.
Los delincuentes se movían con un carrito de bebé que les servía como fachada para esconder el material robado.
Los ladrones tomaron caminos separados. A las pocas cuadras, la policía logró detener a un hombre de 30 años, que caminaba con cinco metros de tendido eléctrico al hombro. El cómplice con el cochecito escapó.
El detenido, junto con el material incautado, fue trasladado a sede judicial, quedando a disposición del magistrado interviniente.