La inflación pegó un salto en la Ciudad de Buenos. En julio el Índice de Precios al Consumidor porteño registró un incremento de 2,5%, versus el 2,1% de junio y 1,6% de mayo. Así la inflación acumula en los primeros siete meses del año una suba de 18,1% y una variación interanual del 40,9%, de acuerdo a la medición del Instituto de Estadística y Censos de CABA.
Los precios de las frutas subieron el 4%, los de las verduras y hortalizas el 6,9%, servicios financieros 4,8%, transporte de pasajeros el 5,6%, restaurantes y hoteles 5,3% y paquetes turísticos 22,3%.
El aumento de los servicios (3,3%) casi triplicaron a los bienes (1,2%). Y en lo que va del año los servicios treparon un 21,8% versus el 12,8% de los bienes. De esos datos se desprende que la inflación golpeó más a la clase media que destina una proporción mayor de sus gastos a los servicios.
El Informe oficial destaca que “los bienes y servicios Estacionales promediaron un alza de 9,0%, principalmente por los aumentos en las tarifas del alojamiento en hoteles por motivos turísticos y de los paquetes vacacionales" y de frutas y verduras. En sentido contrario, las caídas en las prendas de vestir contribuyeron a quitarle presión a esta agrupación."
Es que el rubro prendas de vestir tuvo en julio un retroceso del 2,5% y en lo que va del año acumula una suba del 8,2%, menos de la mitad del IPC promedio del 18,1%. Se atribuye esta situación a la caída del ingreso disponible de las familias y a las importaciones.
El Informe señala que “durante julio la variación del IPCBA respondió fundamentalmente a las subas en las siguientes divisiones: Restaurantes y hoteles, Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, Transporte, Alimentos y bebidas no alcohólicas y Recreación y cultura, que en conjunto aportaron 1,93 puntos porcentuales al alza del Nivel General”.
El comportamiento de los precios según los rubros:
Restaurantes y hoteles aumentó 5,3%, por los incrementos en las tarifas del servicio de alojamiento en hoteles por motivos turísticos y en los precios de los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comidas.
Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles registró una suba de 2,3% por las actualizaciones en los valores de los alquileres y de los gastos comunes por la vivienda.
Transporte promedió un incremento de 3,6% debido a las alzas en los precios de los pasajes aéreos y los ajustes en los valores de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar y del boleto de colectivo urbano.
Alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó 1,8%, por las Verduras, tubérculos y legumbres (6,9%), Carnes y derivados (1,2%) y Pan y cereales (1,6%).
“En términos interanuales, las divisiones Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, Alimentos y bebidas no alcohólicas, Restaurantes y hoteles y Transporte, fueron las principales responsables del incremento de los precios minoristas, explicando el 59,6% de la variación interanual del Nivel General” (40,9%), concluye el Informe.