Mañana, el gobierno y el Banco Central se jugarán la permanencia de millones de pesos y las posibles consecuencias que traería para la economía si muchos inversores deciden irse del país. "Esta será una prueba de fuego de si el gobierno puede sortear la trampa en la que se metió solo en el 2016".
El gobierno se prepara a enfrentar el vencimiento de 650 mil millones de pesos en Lebacs que este martes 15 los inversores decidirán renovar o bien retirar.
Si gran parte de estos deciden sacar su dinero, la pérdida de millones de dólares impactaría de lleno a la economía argentina, disparando su valor y por ende, la inflación. Para colmo, mañana mismo se dará a conocer las mediciones de inflación del mes de abril.
Para un economista, el escenario de mañana será"una prueba de fuego", mientras que otro opinó que la actual crisis "es financiera" pero "no económica".
"Esta será una prueba de fuego de si el gobierno puede sortear la trampa en la que se metió solo en el 2016", dijo para INFOCIELO, el economista Alejandro Barrios.
Pero aún si el gobierno pudiera sortear el problema y ofrecerle una tasa muy alta para que los inversores en Lebacs puedan quedarse mañana, para Barrios eso "no implica una solución" sino que se trataría de "postergar la crisis para más adelante".
"Ellos pueden mantener las Lebac en peso y van a exigir una altísima tasa de interés que destruye a la economía", opinó.
Es por esto que desde las primeras horas de este lunes, el Banco Central inyectó 5 mil millones de dólares para frenar la subida del dólar que llegó a cotizar 25,50, en un record histórico de la suba de la divisa.
Para el economista Pablo Bolino, "la clave es ver qué tasa ofrece el BCRA para bajar la demanda de dólares" en el vecncimiento de mañana.
"El BCRA está mostrando una actitud positiva a actuar en pos de bajar el dólar desde la semana pasada. Creo que mañana ofrecerá una tasa de algo más d 40% para Lebac, y seguirá vendiendo dólares", indicó.
Por eso para Bolino, lo que se está viviendo hoy "es una crisis financiera" pero "no económica" y sostiene que "con inflación moderada y el desempleo bajo, el BCRA tiene que usar las herramientas para que la `tormenta financiera` no se transforme en una crisis en la economía real".
Sin embargo, ese problema financiero podría empezar a afectar gravemente a la economía del país, debido al impacto a la inflación y la suba de precios a los alimentos y servicios.
"Los mercados están anticipándose siempre al gobierno, hace un tiempo que viene tomando decisiones tardías. La democracia vuelve estar en juego porque está en manos de los tenedores de bonos y no del pueblo", advirtió Barrios.