Los vecinos del barrio Villa Corina comenzaron a experimentar problemas de conexión. No había tormentas ni falta de pago: era el accionar de dos ladrones de cables.
Las cámaras del 911 captaron el momento en el que dos hombres levantaron una escalera en la esquina de Guillermo Miller y Abramo. Una vez arriba, uno de ellos sacó un cuchillo estilo tramontina con el que comenzó a cortar la fibra óptica.
Una vez abajo, tironeó los vestigios, los enrolló y los guardó. Su objetivo era venderlos luego en el mercado negro.
No obstante, la policía, alertada por las cámaras, llegó al lugar y lo detuvo. Al revisarlo lograron secuestrarle el arma blanca y la fibra.