Al cumplirse dos años del inicio de su gestión al frente del Ejecutivo porteño, Mauricio Macri defendió su gabinete y tomó juramento a los dos nuevos ministros. Diego Santilli, ex legislador del PRO, asumió al frente de Espacio Público, mientras que el escritor y diplomático Abel Posse tomó el mando de Educación.
Además, Eugenio Burzaco se puso al frente de la Policía Metropolitana tras la polémica detencio del anterior jefe de la fuerza, Jorge "Fino" Palacios, y la renuncia del subjefe Osvaldo Chamorro, quien mantenía un vínculo estrecho con el espía Ciro James.
La asunción de Posse fue repudiada por todo el arco opositor, que brindó una conferencia de prensa en la Legislatura. "Más allá de las irresponsables declaraciones de Posse, lo que está en juego es el modelo educativo macrista, que privilegia la escuela privada por sobre la pública y que nos está haciendo perder lo que era un orgullo para los porteños como era la educación", dijo el legislador Gonzalo Ruanova.
Diego Kravetz afirmó que "hay que alertar a la sociedad sobre este tema porque Posse crimiminaliza la conducta de los chicos en vez de ponerse a pensar cómo educarlos". "El gobierno debería estar pensando en educar a los niños en los valores de la tolerancia y el respeto por los Derechos Humanos", opinó Fernando Sánchez, quien agregó: "si así piensa el futuro ministro de Educación no quiero saber lo que piensa el que está formando a la Policía Metropolitana".
Macri ratificó que la nueva fuerza de seguridad "ya es un hecho" y que "en pocas horas va a estar en la calle empezando a ayudar a la Federal en el combate al delito". "Estamos muy contentos porque estamos convencidos de que todo el esfuerzo y el compromiso lograron cambiar años de desidia y abandono. Decimos con mucho orgullo que en dos años hemos hecho mucho más que en diez, aunque sabemos que falta muchísimo más en recuperar el tiempo perdido", subrayó Macri al realizar un balance de su gestión.
En ese marco, agregó: "En estos dos años hemos formado un gran grupo humano: gente sana con buenas intenciones".
Incluso, el mandatario porteño reconoció que su gestión tuvo "errores", pero se mostró confiado en poder "dar muchísimo más a la sociedad por la experiencia acumulada y la mejor sincronización que se ha logrado". Por eso, remarcó que en los próximos dos años su trabajo tendrá tres prioridades, "los niños, la seguridad y la movilidad", y remarcó que hasta no cumplir con estos objetivos no los "van a parar ni a comprar".
Fuente: NA, Télam y DyN
11 de diciembre de 2009