"Se que están pasando por una semana muy triste los argentinos", había dicho Jorge Drexler al principio del show. Fue la primera referencia al caso de Santiago Maldonado, en el primero de sus cuatro conciertos en el Teatro Gran Rex, con entradas agotadas .
Después en medio de un segmento acústico solo con la guitarra encontró el momento justo: "Permítanme decir una cosa. Está muy alejado de mí hacer un comentario político, pero me gustaría dedicarle una canción a Santiago Maldonado. Sé que es una semana jodida. Pero una vida es una vida en cualquier circunstancia. Les pido que hagamos un esfuerzo mínimo de abstracción y pensemos que se trata de la vida de un pibe y la familia está pasándola mal. Todas las vidas merecen respeto".
Acto seguido cantó "Polvo de estrellas", donde repitió la contundente frase: "Toda vida es sagrada". Fue un momento clave y emotivo del concierto, donde la música tocó un sentimiento profundo y provocó el nudo en la garganta de la audiencia.