En Berisso todos lo conocen. Al linyera más famoso del distrito lo llaman “Siete Sacos” y con ese apodo le adjudican decenas de anécdotas y mitos. Los vecinos se habían unido en una causa común: la creación de un grupo de Facebook para encontrarlo, ya que había desapareció el viernes pasado. La idea dio resultado, ya que apareció una semana después en la estación de trenes de San Francisco Solano.
Según publica el Diario Perfil, la leyenda cuenta que su esposa e hijos murieron en un accidente de tránsito y ahí enloqueció. Otros aseguran que era un yesero que trabajaba con sus hermanos en Los Hornos, con quien no tenía buena relación.
Es más, en 1998 las autoridades del hospital Melchor Romero quisieron internarlo, pero el pueblo se movilizó para que “Siete Sacos” permanezca en Berisso. Con este hecho su popularidad trascendió y se hizo aún más conocido en otros barrios del Conurbano. Una de las vecinas aseguró también que muchos desean que sea reconocido como ciudadado ilustre del lugar.
17 de julio de 2010