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EE.UU. sufre el Síndrome de Abstinencia a Lost

Para los adictos, llegó la quinta dosis de la que fue calificada como "la mejor serie de televisión de todos los tiempos".¿Será la final?
Lunes, 09 de marzo de 2009 a las 16:54
Por José Luis Gallego
Quienes no comprendan el significado del párrafo anterior, no tienen más opciones que ver Lost, de lo contrario, estarán perdidos dentro de la gran jungla de la TV. Para aquellos que comprendan, las cartas fueron echadas, están condenados.
 
La cadena AXN comenzó a emitir la 5ta temporada de Lost (como ya es costumbre dos meses después del estreno de la serie en Estados Unidos). La historia de los sobrevivientes del vuelo 815 de Oceanic Airlines, de Sydney a Los Ángeles, fenómeno mundial de audiencia y desencadenador del SAL (síndrome de adiccion Lost) vuelve para su quinta y anteúltima temporada.
 
Entre otras situaciones, o “piezas”, esta quinta temporada presenta a Desmond yendo a la Universidad de Oxford a buscar a la madre de Daniel Faraday. Mientras tanto, los supervivientes que se quedaron en la isla descubren que están en 1954 y que sus atacantes son "los Otros" de aquella época, quienes les habían confundido con soldados estadounidenses que venían a recuperar una bomba de hidrógeno llamada Jughead.  
 
El éxito de LOST reside entre otras virtudes, en no seguir el clásico orden lineal cronológico, introducción- nudo- desenlace, sino en romper el argumento en pequeñas piezas y mostrarlas como si se tratara de un gigantesco rompecabezas. Así, entre pieza y pieza crece la emoción por conseguir ver al final de la imagen completa.

Debido a diversos problemas ocurridos durante el vuelo, el avión tuvo que desviar su trayectoria después de haber perdido las comunicaciones. Esto deja a un grupo de supervivientes en una isla en medio de la nada. Después del accidente, los pasajeros supervivientes se dan cuenta de cuál es su situación, y de que es posible que nadie vaya a rescatarlos en un futuro próximo. Además, desde muy pronto comienzan a observar fenómenos extraños en la isla, y entienden que si quieren sobrevivir van a tener que permanecer juntos.
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