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La primera del verano fue Susana Giménez. La diva, que el próximo 29 de enero cumplirá 65 años, decidió volver al amor después de su desengaño con el uruguayo Jorge Rama y, entre topless y topless, sale con un muchacho 26 abriles menor que ella, Damián Popiloff.
Según la revista 7 Días este es un “nuevo Huber”, ya que “se vende como empresario exitoso pero es monotributista con deudas”. Además sería otro mujeriego más y sus ex lo acusan de mitómano. Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, pero las divas no aprenden más.
La otra que salió al ruedo con el biberón fue Graciela Alfano, que superó a la diva de los teléfonos en el rango etario y con sus 57 pirulos sedujo a un musculoso 29 años menor que ella. El pibe es un modelo llamado Gabriel Del Grosso, que se hizo conocido el año pasado por haber tenido un affaire con la vedette Celina Rucci.
Se ve que haberse separado de Matías Alé tenía a Grace a maltraer y por eso se decidió por el pibe, con el que se la vio a los besos en una fiesta organizada por el omnipresente Ricardo Fort. Según cuentan las malas lenguas, en realidad ella se le tiró encima al muchacho, que no tuvo ni tiempo de reaccionar y que, ya que estaba, se fue con ella de la reunión.
La más tranquila
Aunque parezca mentira, este año Moria Casán abandonó a sus sex toys veinteañeros y, si bien el señor con el que se la ve es menor que ella, la diferencia de edad no es tan grande. Eso sí, Moria tiene menos glamour que sus colegas, ya que su pareja no se llama Damián ni Gaby. Su nombre es Carlos, y le dicen “Pucho”.
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Y si, Ana María Casanova es gasolera, pero lo bueno es que ahora puede conseguir gratis una carpa en Playa Grande, porque Pucho es dueño del Complejo Normandina ubicado en ese balneario marplatense.
La ex de Badalá y Ferrer Vázquez ahora tiene alguien que le pague la cena, pero Susana y Graciela, ¿tendrán que pelar la Gold?