Una pareja vivió una noche de terror que terminó en gritos, disparos y una insólita confusión que los llevó directo a una comisaría en Mar del Plata.
Todo ocurrió cuando un hombre y su novia salieron a comprar comida. En el trayecto, un motochorro intentó asaltarlos, pero en el forcejeo apareció un vecino armado que, al ver la situación, confundió a las víctimas con los agresores y terminó apuntándoles mientras exigía que se tiraran al piso.
“¡Ay mi amor, por favor que no te apunte!”, suplicaba la mujer mientras intentaban explicarle al hombre que eran víctimas y no delincuentes. Pero el temor y la tensión eran tan altos que el vecino no dudó en realizar un disparo intimidatorio al aire y mantener a los tres reducidos hasta que llegó la policía.
El hecho sucedió a la noche cuando el ladrón —que se movilizaba en una moto— interceptó a la pareja en la vereda. Al escuchar ruidos extraños, un hombre que vive en la zona salió con un arma de fuego y, al desconocer quién era quién, los obligó a tirarse al suelo a todos por igual.
Cuando arribó la Policía, se encontró con una escena caótica: dos hombres en el piso, una pistola en manos de un civil y gritos desgarradores. “¡Nos quiso robar! ¡Nos quiso robar, por favor!”, repetían las víctimas entre lágrimas, mientras el verdadero delincuente —ya reducido— intentaba culparlos a ellos.
Los tres fueron trasladados a la comisaría para esclarecer lo sucedido. Allí se confirmó que el joven y su pareja eran las víctimas del intento de robo. El ladrón quedó detenido