El Gobierno nacional declaró monumentos históricos a los depósitos de agua de Caballito, Villa Devoto y Constitución (denominado Ingeniero Paitoví), establecimientos creados para complementar y ampliar la acción del Depósito del Palacio de las Aguas Corrientes donde alojar los tanques de suministro de agua corriente de la ciudad de Buenos Aires.
La medida fue oficializada y publicado en el Boletín Oficial junto a la distinción como bien de interés industrial argentino que recibió la Primera Torre de Toma del Río de La Plata.
Desde el interior del depósito de Caballito se puede observar las características arquitectónicas de la construcción
En 1908, a partir del crecimiento demográfico de la Ciudad de Buenos Aires, la Dirección General de Obras de Salubridad de la Nación creó un plan de abastecimiento que contemplaba la provisión de agua potable para seis millones de habitantes. Por eso creó tres establecimientos para atender la demanda de la población.
Se trata del depósito Caballito, ubicado entre las calles Beauchef, Valle y las avenidas Pedro Goyena y José María Moreno; el depósito Villa Devoto, de la avenida Francisco Beiró y las calles Gualeguaychú, Mercedes y José Pedro Varela; y el depósito Ingeniero Paitoví, ubicado entre la avenida Entre Ríos y las calles Constitución, Combate de los Pozos y Pavón.
El imponente edificio de Villa Devoto, similar a los de Caballito y Constitución
Al mismo tiempo que se avanzaba con la construcción se planificaban los "grandes depósitos de reserva en zonas con cotas de 38 metros ubicados en barrios periféricos de la Ciudad de Buenos Aires, junto con otras importantes obras, como una nueva planta purificadora en Palermo, que reemplazaría a la de Recoleta", de acuerdo a los que informó el Ministerio de Cultura de la Nación.
Los depósitos son como una caparazón que, en su interior, cuentan con una gran estructura metálica con 12 tanques de reserva de cuatro metros de altura y 6000 metros cúbicos de capacidad. Los tanques se encuentran en tres niveles sostenidos por una malla de columnas de hierro que también soportaban el armazón de la cubierta de chapas onduladas en la parte central y las mansardas y cúpulas de pizarras perimetrales.
El depósito Caballito fue habilitado el 25 de octubre de 1915. "Las cañerías de agua filtrada llegaban a los tanques desde las bombas impelentes del Establecimiento Palermo, con un largo de diez kilómetros", se detalla sobre su funcionamiento.
La estructura que funcionó como depósito de agua se distingue en Villa Devoto, en una zona de pocos edificios y viviendas bajas
La construcción del depósito Villa Devoto terminó un año después y se inauguró el 1° de diciembre de 1917; mientras que en Paitoví, también llamado depósito Constitución, las obras se iniciaron en 1948 bajo el gobierno de Juan Domingo Perón y habilitado en 1957.
Los de Caballito y Villa Devoto están activos, pero no operativos; es decir, se encuentran en condiciones de ser utilizados en caso de ser necesario. Mientras que Paitoví aún es una pieza clave y vital dentro del sistema histórico y actual de provisión de agua de la ciudad.
Por su parte, la Primera Torre Toma, ubicada a 800 metros de la ribera frente al Aeropuerto Jorge Newbery, fue proyectada por el ingeniero John Bateman para la provisión de agua, cloacas y desagües pluviales. Fue habilitada en 1895 y actualmente se encuentra inactiva.
"La torre presentaba, en sus cuatro caras, formas neoclásicas, con almohadillados y cornisamento perimetral superior, y una planta cuadrada. Por dentro contaba con un cilindro, de tres metros de diámetro, ubicado 2.60 metros del nivel máximo de crecidas. En el interior del cilindro se cavó un pozo a más de 10 metros bajo el lecho del río", describe la empresa Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) en su página web.