Grúas polémicas: la Ciudad ya puso una fecha para hacerse cargo del servicio de acarreo
Después de anunciar la estatización Horacio Rodríguez Larreta debió negociar con Camioneros que amenazaron con paralizar otros servicio
Semanas después de confirmar que se hará cargo del servicio, la Ciudad le puso fecha al inicio de las operaciones propias para el acarreo de vehículos en infracción que durante décadas realizaron dos empresas con contratos vencidos y múltiples irregularidades en el funcionamiento de la actividad. Estas situaciones provocaron la reacción del gobierno porteño que por decreto finalizó la relación con las prestadoras.
El 22 de septiembre, según fuentes oficiales, será el día que Autopistas Urbanas SA se hará cargo del servicio y comenzará a recorrer las zonas que hoy son monitoreadas por Dakota y BRD, principalmente en el microcentro, el Casco Histórico y otras zonas en diversos barrios.
La medida fue publicada en el Boletín Oficial por la Secretaría de Transporte y Obras Públicas y la resolución establece que las empresas cuentan con 15 días hábiles para dejar de operar el acarreo. Ambas ya fueron notificadas el 31 de agosto, días después que el Ejecutivo estableciera que asumiría el control del servicio público de acarreo de vehículos mal estacionados.
Dakota y BRD son las empresas que se reparten el servicio desde 2001, con contratos vencidos y otras irregularidades
La medida, anunciada de apuro por Horacio Rodríguez Larreta y su jefe de Gabinete, Felipe Miguel, se precipitó por la amenaza de la Coalición Cívica y sus legisladores, que responden a Lilita Carrió, que amenazaron sumarse al pedido de la oposición en el frente antigrúas con el objetivo de debatir en la Legislatura la suspensión del servicio.
Desde ese entonces el gobierno de la ciudad comenzó una negociación con el líder del sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, por el destino de los trabajadores que, de acuerdo al decreto, debían mantenerse. "Se deberá resguardar la totalidad de los derechos de todos los trabajadores que se encuentran bajo relación de dependencia de las actuales concesionarias", dice el texto.
En medio de la disputa Moyano amenazó con paralizar el servicio de recolección de residuos en la Ciudad y programaba una movilización a la Legislatura para el jueves pasado. "Los quieren pasar a AUSA y automáticamente perderían la mitad del sueldo", explicaba el sindicalista antes de llegar a un acuerdo.
Para el gremio se trata de 500 trabajadores, pero el Ejecutivo dice que son 350 empleados que están bajo el convenio de Camioneros. El conflicto emerge porque AUSA la totalidad de la planta está afiliada a otros dos gremios: el 85% a Comercio y el 15% a la UOCRA.
La negociación se cerró con el acuerdo de que los ex empleados de Dakota y BRD pasarán a depender de Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (SBASE) y, de esa manera, se garantizará el convenio colectivo de trabajo de Camioneros.
A pesar de tener una fecha establecida para el inicio del servicio aún no se estableció que infraestructura utilizará AUSA ni las grúas. En estos días la Ciudad continúa la mediación con las empresas para poder utilizar sus grúas o alquilar otros vehículos. Las playas de acarreo funcionan en predios que pertenecen a la Ciudad.