La información se desprende de la segunda autopsia practicada en marzo en la ciudad de Cuenca, Ecuador.
Desgarradores detalles. La segunda autopsia practicada sobre los cuerpos de Marina Menegazzo (21) y María José Coni (22)confirmó detalles aún más dolorosos de los que se conocían hasta el momento: las chicas fueron abusadas antes de morir. Las jóvenes mendocinas fueron asesinadas el pasado 22 de febrero en Montañita, Ecuador.
Según consta en el reporte forense, la pesquisa realizada el 22 de marzo en la ciudad de Cuenca confirmó queMarina sufrió un ataque sexual en la madrugada en la que fue asesinada. Los forenses, en tanto, trabajan en la confirmación de lo que sucedió conMaría José: quien según los primeros peritajes también fue abusada.
“No puedo brindar detalles sobre el tema”, respondió Hernán Ulloa Ordóñez, abogado de las familias de las víctimas. “Necesitamos seguir investigando, el caso todavía está abierto”, justificó.
La confirmación de los ataques llegó después de que el Fiscal General de Ecuador, Galo Chiriboga, removiera el 14 de marzo al segundo fiscal de la causa, Eduardo Gallardo, y designara en su lugar a María Dolores Coloma Pazmiño. Ocho días después, fue ella quien dio lugar a las 200 nuevas diligencias solicitadas por las familias Menegazzo y Coni, luego de notar irregularidades en el expediente.
En las horas posteriores al hallazgo de los cuerpos, el primer fiscal de la causa, Juan Pablo Arévalo, ya había anticipado que los análisis preliminares advertían que el doble homicidio se cometió “con saña en cada una de las víctimas”. La segunda autopsia confirma sus dichos: ambas sufrieron múltiples lesiones, tal como ya lo habían advertido también los cuatro peritos argentinos que viajaron a reconocer los cuerpos.
Javier Ureta Sánez Peña, uno de los médicos legistas argentinos que viajó para reconocer los cuerpos, advirtió en su momento: “Vimos un exceso de violencia y ensañamiento en los cuerpos. Según las autopsias, uno de los cuerpos presentaba lesiones y golpes importantes en el cráneo. El otro una lesión punzante en el cuello que llegaba hasta la médula”.
El documento oficial que permite esclarecer qué fue lo que sucedió con las chicas esa madrugada. Sólo en uno de los cuerpos, los peritos registraron ocho heridas punzocortantesen la cabeza y cuello. Las fotos que acompañan el registro no serán publicadas ni divulgadas por este sitio, pero confirman los testimonios de los familiares que tuvieron que viajar para reconocerlas.
“No quise entrar a hacer el reconocimiento, pero manejamos cierta posibilidad de que no fueran porque los cuerpos estaban irreconocibles.Entró mi cuñado (Cristian Pisano), y cuando salió me dijo que no la pudo reconocer”, advirtió en su momento Marcos, el hermano mayor deMarina. “Tener que ver los cuerpos de las nenas y no poder reconocerlos fue un calvario. Una película de terror realmente”, sumó Paula, otra de las hermanas.
Las sospechas de las familias fueron despejadas el 16 de marzo, cuando los peritos argentinos lograron confirmar que los cuerpos que se encontraban en la morgue de la ciudad de Guayaquil eran los de Marina yMaría José. Y allí,luego de contratar a cinco abogados, emprendieron el viaje hacia la búsqueda de la verdad.
Fuente: bigbang