Creada en 1937, es una modalidad deportiva que a lo largo del tiempo se caracterizó por atraer numerosos fanáticos, que alientan a sus pilotos o marcas de automóviles favoritas.
En la época de las competencias en rutas, motivo de esta nota (fines de los ‘40s), el TC se vivía con una pasión arrolladora. La televisión no existía, por lo tanto los seguidores se instalaban a los costados de los caminos polvorientos, soportando estoicamente las inclemencias del tiempo.
Los que se quedaban en sus casas, seguían el desarrollo de las carreras en aquellas venerables radios a válvulas. Por eso causó gran conmoción en Villa Ballester cuando se escuchó la noticia que indicaba la llegada al barrio de San Martín una competencia de ese tipo.
Efectivamente, el 11 de Septiembre de 1949 se realizó el premio “Juan Manuel Fangio”, auspiciado por la Cruz Roja, de la mencionada localidad. Muchos corredores destacados participaron del evento, entre ellos el ballesterense Félix Peduzzi; además de Daniel Musso, Angel lo Valvo, German Pesce, Ernesto Petrini y Emilio Karstulovic, entre otros.
Según testimonios, el circuito fue creado para ese motivo muy cerca del lugar que ocupaban las famosas Piletas Marimon, en Jose León Suárez.
Una visita de lujo fue la del balcarceño Juan Manuel Fangio, quien pocos años después lograría obtener el record de cinco campeonatos de Formula Uno. El Chueco dio la señal de partida y presenció el evento deportivo en un sitio preferencial, acompañado por una gran cantidad de público.
Después de cuatro series preliminares, la victoria fue obtenida por el local Peduzzi (con un promedio de 115,540; seguido por Dalmo Bojanich y en el último sitial del podio, Manuel Cobas. Más atrás clasificaron Hugo Llamazares, Remo Zalamero, Esteban Zokol, Rolando Castelli y Alberto Fava.
Debido a la gran importancia del evento, fue cubierto por distintos medios de comunicación, entre ellos el diario Clarín y la revista El Grafico. Es de destacar que Félix Peduzzi, por su estilo de manejo, es una presencia ineludible en toda publicación dedicada a la historia del automovilismo. Por lo cual fue declarado “vecino ilustre” en 2006, por el Honorable Consejo Deliberante del Partido de General San Martín.
Desgraciadamente fue la única carrera de este tipo que se realizó en nuestro partido, pero aquellos que la presenciaron, sin dudas la tendrán bien guardada en su memoria.