La Policía Federal realizó un operativo simultáneo en seis viviendas del barrio de Villa Celina para desbaratar una red de talleres ilegales en los que los niños vivían en condiciones infrahumanas. Hay al menos 20 detenidos, defendidos por algunos vecinos.
Varios empleados salieron a defender a sus empleadores, y sostuvieron que si trabajaban muchas horas, lo hacen voluntariamente. En estos momentos, un grupo se concentra frente a uno de los talleres allanados, ubicado en Strangford (colectora de la Autopista Richieri) al 1700, entre Rivera y Álvarez, para protestar por las detenciones. Hay incidentes entre la policía y los manifestantes, que arrojan piedras mientras los efectivos les responden con balas de goma.
En diálogo con 24CON, un vecino del barrio explicó que el conflicto se inició cerca de las 13, cuando "llegó un helicóptero de la policía" al lugar para comenzar con los allanamientos. Además, aclaró que "todo estaba bastante tranquilo" hasta que un grupo de integrantes de las comunidades boliviana y peruana "que no eran empleados del taller, se sumaron a los demás y empezaron a tirar piedras".
"Los empleados dicen que quieren conservar el trabajo y que no son explotados, porque les pagan 1200 pesos", agregó el vecino.
Explotación y servidumbre
Tras seis allanamientos conjuntos y simultáneos en el barrio de Villa Celina, partido de La Matanza, la Policía Federal detuvo al menos a 20 personas, entre los que se encontraban 14 indocumentados de nacionalidad peruana y boliviana, acusados de esclavizar a menores de edad. Además, otros dos allamamientos similares se llevaron a cabo en Laferrere y San Justo.
Los niños vivían y trabajaban, sin recibir ningún pago, en talleres textiles ilegales en los que se producían imitaciones de grandes marcas deportivas para la reventa.
A las acusaciones de trata de personas, servidumbre infantil y falsificación de marcas, se suman otras por condiciones de vida infrahumanas en las que los menores debían vivir, en la modalidad conocida como "cama caliente": talleres en los que se trabaja las 24 horas, con turnos rotativos.
Sin embargo, vecinos del lugar reconocieron haber trabajado en condiciones "decentes" en el lugar y nunca haberse sentido explotados. “Nos pagaban bien”, señaló uno de los testigos, y agregó: "trabajaba 8 horas, si quería trabajar más, me lo pagaban como horas extras".
Marcelo Chebriau, Comisario mayor, explicó que se encontró "un menor de 15 años sometido a explotación y servidumbre". Los lugares estaban administrados por argentinos, peruanos y bolivianos, pero las personas "bajo condiciones de trabajo no reguladas por la legislación y con infracciones en cuanto a la ley de trata de personas", según la fuente.
El Comisario explicó que las personas detenidas "van a ser puestas a disposición del juzgado".
Meses atrás, la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI) estimó que la mitad de los 165 mil trabajadores que emplea la cadena textil trabaja en condiciones de "esclavitud". El hacinamiento y la mala alimentación producen anemia y, por el polvillo acumulado en el ambiente, frecuentes casos de tuberculosis y otras enfermedades pulmonares.
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