La postura oficial sobre la revisión de los términos y condiciones del pago de la deuda con el FMI tiene representantes en el territorio: los intendentes peronistas del conurbano. Con más o menos matices, y con mayor exposición dependiendo del caso, los alcaldes del PJ hicieron oír su voz a la hora de presionar hacia dentro del Frente de Todos para alcanzar una postura común.
Los intendentes del núcleo duro cristinista están alineados con Máximo Kirchner, uno de los primeros en plantear la necesidad de no poner en riesgo la economía doméstica para cumplir con el Fondo, incluso a riesgo de que sus diatribas fueran leídas como un intento de saboteo de las negociaciones.
Esa discusión a cielo abierto, que se produjo mientras el ministro de Economía, Martín Guzmán, recorría Estados Unidos, fue encontrando su cauce en la coalición a punto tal que hoy es el propio Alberto Fernández el que advierte que no está dispuesto a cerrar un acuerdo a cualquier precio.
Antes de llegar a esta postura -clave para el oficialismo a semanas de las elecciones legislativas del 14 de noviembre-, los intendentes fueron los portavoces de este reclamo en el territorio y donde la política se los permitiera, como se vio en el acto por el 17 de octubre en Plaza de Mayo.
¿Por qué? "Mientras más recursos haya para obras municipales, ellos están contentos", graficó ante A24.com un colaborador de un intendente de la Tercera Sección, que ratificó que en este aspecto "no hay diferencias" entre los jefes del peronismo.
"Siempre están con quien les pueda garantizar que va a haber recursos para terminar las obras y los proyectos; además es la misma postura del gobierno nacional y en esto no hay grieta", añadió la misma fuente, apelando al manual del pragmatismo.
Sobre ese aspecto, muchos en el conurbano recuerdan que, una vez que Néstor Kirchner saldó la deuda en 2006, sobrevino luego un raid de obras y planes para la provincia como el Trabajar, Agua + Trabajo (A+T) y Cloacas + Trabajo (C+T), entre otros.
Conformes
Entre los intendentes del PJ fue bien recibida la participación de Alberto en la cumbre del G20 en Roma. "Logramos incluir en el documento la revisión de la política de sobrecargos del FMI. Ahora falta que el Fondo lo acepte", destacaron ante este portal desde uno de los municipios del sur del Gran Buenos Aires.
"Queremos que paguen un costo por haber otorgado un préstamo a Mauricio Macri en condiciones inaceptables; que se hagan responsables y se compense con los intereses que se cobran", analizaron en el PJ, al calificar como un "éxito" el reclamo argentino en la cumbre europea.
Se refieren a la resolución del G20 para que el FMI revise su política de sobrecargos, una postura que está en línea con el planteo que el Gobierno argentino venía haciendo en distintos foros y en sus negociaciones con el organismo multilateral.
"Esa fue la parte política, ahora falta la parte financiera con el FMI", calculan en el conurbano, donde se muestran unidos ante esa posición común. "Los intendentes entienden que, si los recursos están para el FMI, no están para las obras", agregó otra fuente.
De dónde se venía
El kirchnerismo duro -con muchos intendentes enrolados- había hecho estos reclamos durante la celebración en Plaza de Mayo del Día de la Lealtad del 17 de octubre. Con Hebe de Bonafini a la cabeza, el sector más radicalizado del Frente de Todos había pedido no pagar en las actuales condiciones. Entre los oradores de aquel escenario hubo un intendente: el ensenadense Mario Secco, cercano a Cristina.
"Todos los que estamos acá somos parte del pueblo que lo votó y que lo va a seguir votando si se comporta como debe y nos acompaña a no pagar la deuda externa, que es un robo de Macri", le había advertido Bonafini a Alberto en aquella oportunidad, flanqueada por otros aliados de los "duros" como Amado Boudou, Roberto Baradel y Daniel Catalano, de ATE.
Otra intendenta que se expresó públicamente fue Mayra Mendoza, de Quilmes, que sostuvo que "hay que pagarle al FMI pero no con el hambre de la gente". "El que le pagó al FMI fue Néstor, y los que nos endeudaron siempre fueron los mismos", dijo la dirigente camporista, en declaraciones a Futurock, sobre la gestión de Cambiemos.
"Recordar a Néstor en su versión completa es recordar lo que hizo con la deuda, con el control de precios y con los medios", había advertido la intendenta, en medio de la discusión por el pago de la deuda.
La postura de Máximo sobre el FMI
El jefe de La Cámpora es, en este contexto, quien más se posiciona en el reclamo al Fondo (y al Gobierno) para que se revisen los términos del eventual acuerdo.
"La Argentina necesita tiempo para afrontar la enorme deuda que contrajo Macri y además dilapidó. Necesitamos un cambio de mirada del FMI para contar con la mayor cantidad de tiempo posible, y para que puedan alejarse un poco de las reglas porque, a la hora de prestar, no cumplieron", planteó este sábado el hijo de Cristina en declaraciones a El Destape Radio, mientras el Presidente se reunía con la titular del Fondo, Kristalina Gerogieva, en Roma.
El dirigente buscó tener un punto: "Cuando se ponen tan reglamentistas uno piensa que hubiera sido bueno que lo hicieran a la hora de prestarle plata a la Argentina".
Como portavoz de uno de los sectores de la coalición, Máximo trató también de pasarle la pelota a Juntos por el Cambio y sostuvo que sería "importante saber qué piensa la otra fuerza política mayoritaria, porque no sólo son parte activa de la realidad argentina sino que fueron ellos quienes tomaron esta deuda".
En definitiva, es uno de los objetivos principales del Gobierno en el plano doméstico para después de las elecciones: concretar un "diálogo político" con la oposición para afrontar una pirámide de temas que tiene, en su vértice, a la deuda.