Xiao Lei, que nació en el sur de China, inicialmente pesaba alrededor de 3,5 kilos, cifra promedio en un recién nacido. Pero, gracias a un gran apetito que comenzó un mes más tarde, ahora tiene el doble del tamaño que muchos bebés de su misma edad: con apenas 10 meses de vida, llegó a los 20 kilos. O sea, lo que normalmente debe pesar un niño de 6 años.
A la madre del enorme bebé, Cheng Qingyu, le es difícil sostener a su hijo en brazos durante mucho tiempo. Por el tamaño, dice que tiene que descansar cada diez minutos.
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Además, asegura que no está preocupada por las versiones que indican que su pequeño, que ya fue bautizado por la prensa como “el bebé Michelín” - por su parecido con la mascota de la empresa de neumáticos -, podría haber consumido alimentos con exceso de hormonas.
"No se puede decir que no tenga buen apetito. Se paso la mayor parte del día mamando y el resto durmiendo. Y cualquier cosa que agarra se la lleva a la boca y la succiona como si fuera alimento", explica la mamá.
Xiao Lei está siendo atendido en el Hospital de Hunan para la Infancia, donde están experimentando con una serie de exámenes médicos para conocer qué fue lo que le hizo ganar tanto peso.
Los médicos del hospital señalaron que este sobrepeso podría causarle problemas en el corazón y la presión arterial.
Según datos oficiales, más de 60 millones de chinos son obesos mórbidos, y por encima de 200 millones tienen sobrepeso. Por eso, el Gobierno de Beijing colgó en su web el caso de este niño, a modo de advertencia. En poco tiempo, se convirtió en la sensación de la red.