Así, ya sea en un lugar transitado como una feria de negocios o en la intimidad del propio hogar, la posibilidad de acceder a la tecnología lúdica está al alcance de quienes buscan diversión de alta gama. En Europa, Asia y Estados Unidos el concepto de mega simuladores de golf se convirtió en una solución para aquellos deportistas que ven frustrados sus deseos de jugar a partir de factores limitantes como el clima hostil y la escasez de espacio en países donde instalar un campo de golf implica una lucha con la geografía. A partir de estas problemáticas, el crecimiento mundial de espacios con simuladores y amenities creció exponencialmente. El fenómeno no fue ignorado por los emprendedores Pablo Muñoz, Diego Blejer, Waldo Wolf, Raúl Schvartzman y Osvaldo Álvarez, quienes se asociaron luego de analizar, tal como explica Blejer “si se podía adaptar el negocio en Latinoamérica. Entendimos que sí porque aquí, aunque distinto al de otras regiones, también existe un problema. A los ejecutivos golfistas que trabajan en los centros financieros se les complica, cada día más, escaparse un día entero a un campo de golf e inclusive a los drivings ranges en los horarios pico por el caos de tránsito”. Así, como solución al dilema local, surgió la idea de inaugurar The Green Club, el primer centro urbano de golf bajo techo de Latinoamérica en el Hotel Panamericano Buenos Aires, lo que demandó una inversión de u$s 500 mil. “Somos el primer hotel del mundo en tener un espacio tan exclusivo y novedoso”, asegura entusiasta y orgulloso Leandro Ruffini, director de Ventas y Marketing del cinco estrellas porteño.
El complejo de 600 m2 posee cuatro simuladores About Golf: los oficiales del PGA Tour. Dos de ellos son de tres pantallas envolventes que aportan un visión de 150 grados; y las otras dos de una pantalla, ideales para tomar clases, practicar putting, tirar bolas en el driving range y hacer fiting. “Tomamos la representación de About Golf Simulator porque entendíamos que si vamos a desarrollar el primer indoor golf center de Latinoamérica y lo íbamos a orientar al segmento corporate, teníamos que tener la mejor tecnología del mundo. Ya en el primer focus group notamos un entusiasmo muy grande”, explica Blejer, director Comercial de The Green Club.
Además de jugar virtualmente en algunas de las 40 canchas más famosas del mundo -muchas de ellas homologadas y certificadas para recibir grandes campeonatos de profesionales- como Saint Andrews o Pebble Beach, es posible tomar clases para mejorar el desempeño, realizar clínicas de golf y hasta disfrutar de originales eventos corporativos. Putting green, resto bar, pro shop y locker rooms con sauna y salones VIP exclusivos para los clientes son las demás instalaciones que pueden aprovecharse en el tercer subsuelo del Panamericano Buenos Aires de lunes a sábados. Los usuarios pueden jugar 18 hoyos en una hora a partir de los u$s 35 además de utilizar las duchas, disfrutar del sauna y contar con guantes y palos de las mejores marcas. Membresías corporativas y gift cards son parte de las alternativas que están disponibles para quienes añoran un espacio alternativo adaptado a sus tiempos y exigencias. La membresía otorga el derecho de jugar, por el lapso de mes, un día a la semana durante una hora a cambio de $ 420 o $ 600 mensuales según el tipo de simulador que se elija.
Además, implica contar con una serie de beneficios como descuentos en gastronomía y en el golf shop, facilidades para jugadores invitados y la posibilidad de bloquear los horarios para todo el mes.
Los simuladores, indica Blejer, constituyen “una herramienta muy buena para iniciarse en el golf y para perfeccionarse. Porque además de entretener, filman el golpe y el movimiento. Tiene ventajas sobre ir al driving. Acá tenés profesionales y toda esta tecnología a tu servicio”. La academia cuenta con dos profesores, diferentes planes de trabajo tanto individuales como grupales y la virtud, por sus prestaciones, de analizar las variables de la pelota y el swing, entre otros aspectos que constituyen un valor agregado a la hora de corregir defectos. “En cuanto a las clínicas, hay un convenio con el hotel para que sea posible disponer del gimnasio para realizar determinado tipo de ejercitación que favorezca la práctica del golf. Inclusive estamos viendo la posibilidad de incursionar en la medicina deportiva para recuperarse de lesiones y poder retomar este deporte”, indica Pablo Muñoz, Managing Director de The Green Club. Advierte, además, que el mismo modelo que ahora se instala en Buenos Aires, es decir aquel que se orienta a una clase ejecutiva y se ubica en pleno centro financiero, ya existe en otras tres ciudades del mundo: Nueva York, Londres y París. “Argentina es el país más golfista de Latinoamérica por cantidad de canchas y jugadores con handicap”; por lo que abrir este primer centro de golf bajo techo es, más que una opción, una solución. América Latina posee “cerca de 900 canchas y en el país tenemos apenas más de 300”.
Al ser los distribuidores en toda la región de los simuladores About Golf -entre otros productos de la industria-, los cinco socios de The Green Club prevén, en un plazo de 24 meses, replicar el modelo local en otras tres ciudades: Santiago de Chile, México DF y San Pablo. Es que después de Argentina, “el segundo país en importancia en materia de golf es Chile, tercero México y cuarto Brasil. Los dos últimos nos interesan más que nada por su volumen e ingreso per capita en determinado segmento. Todo indica que Brasil y México estallarán en los próximos cinco años a nivel golfítistico” concluye Muñoz.