La recopilación de casos fue realizado por el observatorio de la asociación civil La Casa del Encuentro: no existen (ni existieron alguna vez) datos oficiales de violencia de género en Argentina. “Todas estas muertes podrían haberse evitado”, explicó a 24CON la presidenta de la ONG, Ada Rico: “Por eso buscamos denunciar y llamar la atención sobre el tema. Sabemos que hay muchos más que estos casos”.
“El femicida no solo asesina a mujeres y niñas, sino también a varones que sean familiares o alguien que pueda intermediar en su estrategia”, aseguró Rico sobre los casos “vinculados”. Los datos del observatorio aseguran que las provincias con mayor índice de femicidio son Buenos Aires (28%), Córdoba (11%), Santa Fe (11%), Misiones (10%), Mendoza (10%) y la Ciudad de Buenos Aires (5%).
La modalidad del ataque presenta una clara mayoría: el 68 por ciento sufrió acceso directo corporal o fue atacada con arma blanca, mientras que el 26% fue agredida con arma de fuego. En cuanto al vínculo del atacante con la víctima –que en su gran mayoría tiene entre 19 y 50 años-, el 75% son directos y afectivos (de los cuales el 60% son esposos-parejas-novios y ex).
La creación de bancos estadísticos oficiales “es clave para poder profundizar políticas públicas para prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género”, sostiene Rico. La presidenta de la Comisión de Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia de Diputados nacional, Juliana Di Tullio (FpV), aseguró a este medio que la Ley sancionada –pero aún no reglamentada por el Consejo Nacional de la Mujer- contra este tipo de violencia, exige al Ejecutivo tener cifras. “No hubo nunca en la historia estadísticas serias, y la Ley es muy ambiciosa y reconoce por primera vez que existe la violencia por el sólo hecho de nacer mujer. Además, pide no sólo cuantificar las muertes, sino todo tipo de violencia”, dijo Di Tullio.
Aunque sostuvo que “esta Ley se limita a alguno ámbitos”, la legisladora Claudia Gil Lozano (Coalición Cívica) y vocal de la comisión que preside Di Tullio, destacó que “es un peldaño que se avanzó en el tema”. “Hablamos de violencia de género, pero no se plantea el femicidio, cuando te matan por el sólo hecho de ser mujer. Creo que hay que tipificarlo como un delito en el Código Penal, aunque es un tema difícil”, remarcó Gil Lozano, en sintonía con lo planteado desde La Casa del Encuentro: “Es importante que sea una figura autónoma, para que no siga pasando lo que sucede en la mayoría de los casos, en el que bajo la carátula de emoción violenta o sin intención, la pena aplicada al asesino no supera los 10 años”, denunció.
La Casa del Encuentro es sólo una de las tantas asociaciones civiles que luchan cada día contra la violencia de género y la trata de personas, y el jueves presentará en la sala José Luis Cabezas del Congreso el informe de su observatorio, que lleva el nombre Adriana Marisel Zambrano (asesinada por su marido, que recibió cinco años de prisión). Este miércoles, Día Internacional de la No Violencia hacia las Mujeres, marcharán desde las 17 del Congreso hasta la Catedral metropolitana para exigir el respeto de los derechos de las mujeres.