El embajador argentino en aquel país Eduardo Porretti lo dijo claramente: "Él estaba queriendo desarrollar una actividad profesional para la cual no tenía la visa correspondiente".
Entonces, las "autoridades le informaron que al no tener la visa y la autorización correspondiente no podía ingresar al territorio venezolano".
"Al no estar admitido, va a ser deportado en el próximo vuelo de la aerolínea Copa a Panamá", agregó.