Otra vez un trabajador fue víctima de un hecho de inseguridad con motochorros como protagonistas.
La escena ocurrió en las intersecciones de Allende y Kloosterman, en Monte Chingolo, a las 6:30 de la mañana. Allí, un joven esperaba el colectivo para ir a trabajar junto a una mujer.
De la nada, dos delincuentes a bordo de una moto aparecieron en contramano. El acompañante se bajó y a punta de pistola ahuyentó a la mujer y logró sacarle el teléfono y la mochila al trabajador que, resignado, no opuso resistencia.
Cuando parecía que el ataque había terminado y los ladrones emprendían la fuga, pegaron la vuelta y volvieron por el abrigo. “Dale, traeme la campera”, le exigieron al joven que se la sacó pero no quería acercarse por miedo a recibir un tiro.
Finalmente se las revoleó y los motochorros huyendo a toda velocidad.