Más de 30 edificios sepultados y al menos 59 personas desaparecidas es el saldo, hasta el momento, de un gigantesco alud que se produjo este domingo en una zona industrial del sur de China.
Más de 1.500 socorristas fueron enviados al lugar tras el deslizamiento de tierra ocurrido en Shenzhen, una ciudad de la provincia de Cantón situada justo al norte de Hong Kong.
Los rescatistas lograron sacar de los escombros a cuatro personas. Según la agencia oficial Xinhua, tres de los cuatro rescatados sufren heridas leves, mientras que el cuarto está sano y salvo.
El diario Shenzhen Evening News afirmó que unas 900 personas pudieron ser evacuadas antes de la tragedia. Una estimación difundida en las últimas horas de la noche del domingo por el mismo medio establece en 59 personas la cantidad de personas que seguían desaparecidas.
A su vez, treinta y tres edificaciones residenciales e industriales fueron sepultadas por el alud, entre ellas dos usadas como dormitorios por trabajadores, según la televisión pública CCTV.
Mientras los rescatistas trabajan en el lugar en busca de sobrevivientes, los especialistas intentan determinar las razones del fenómeno que provocó la tragedia.