"Esas dos pistolas son de balines"

Las fotos que publicó 24CON, donde se ve a su hijo -prófugo de la justicia- portando armas la decidió a hablar. Afirma que ella tiene códigos y enfatiza: "Me pego un tiro ahí abajo antes de dormir con un policía". Drogas, pandillas y el poder de la calle en la historia de una mujer.

Por Federico Trofelli
Gladys Silveira (de 48) vivió sus primeros años en un asentamiento de Tres de Febrero hasta que la construcción de los monoblocks del Barrio Presidente Sarmiento (luego pasaría a ser la peligrosa Villa Carlos Gardel) ofreció mejorar la calidad de vida de su familia. A los 8 años “ya callejeaba”. Y entendió que debía hacerse fuerte para sobrevivir en un mundo dominado por otros hombres, también fuertes.

“A los 11 años me empecé a escapar de casa porque mi mamá estaba separada de mi papá y trabajaba todo el día”. Así fue que empezó a faltar a la escuela y se iba “a vagar por ahí” o a juntarse con la gente de la murga ya que siempre le gustó bailar. “Cuando volvía a casa mi mamá me recagaba a palos pero al otro día me volvía a escapar. Cuando venía mi papá los fines de semana porque nos traía mercadería y plata, me agarraba él y me volvía a dar. Yo me ponía un pantalón y escapaba otra vez”, contó la mujer con un dejo de nostalgia.

Poco a poco la mujer fue creciendo en el mundo del hampa aunque hoy asegura haber dejado la mala vida atrás. Cuando tenía 26 años conquistó a Jerónimo Romero que tenía 18 –líder indiscutido entre los suyos hasta su muerte-, con quien estuvo casada 21 años.

El destino quiere que siga siendo la Negra Nipora y no señora Gladys, como ella preferiría. Ahora, agrega a todas sus penas, defender -como siempre- a los suyos del sistema que los persigue y de los vecinos que claman venganza.

Después de varias denuncias cruzadas, la Negra Nipora da la cara y sale a responder a Carmen Medina, familiar de los Peña -vinculados al mundo de la droga-. Carmen es la madre de Eduardo “Polo” Caballero (27), asesinado en septiembre de 2007 a balazos y puntazos en el playón principal del barrio. El Bebe Romero, hijo de Gladys, fue uno de los principales acusados del crimen aunque luego la Justicia lo desentendió de la causa.

- El Bebe está prófugo, ¿no lo vas a entregar?
El Bebe Romero, hijo de Gladys.


Él cae por una mentira que dicen ellos. Mi hijo se fugó, no puede pasar toda la vida en cana por algo que no hizo. Lo voy a defender y no voy a dejar que lo ensucien más ni a él ni a mi familia. Se metió con toda mi familia, ahora que se la aguanten porque hablan como si me conocieran. Van a tener que comprobar todo porque los prófugos de esa causa son personas que andan con ellos.

- ¿Qué hizo, supuestamente?
Hubo un robo y se tirotearon con la policía (un efectivo quedó herido)… yo sé quienes fueron pero El Bebe no estaba y ellos como son amigos de la policía le dijeron que estaba mi hijo metido.

- Pero se escapó y lo busca la Justicia
Dicen que mi hijo se escapó de Pablo Nogués, pero no es así. Él estuvo en un régimen abierto en Mercedes. Una semana estuvo. Era un chalet todo abierto, el que estaba ahí le dijo que si quería se podía ir. Él igual se quedó una semana. Yo lo fui a visitar y ese mismo día, más tarde, se fugó y vino un tiempo a mi casa, después se fue.
 
- Si no tiene nada que esconder que se presente…
Lo vinieron a buscar pero él no se encontraba en mi casa. Les dije eso y todo quedó ahí, nunca más vinieron a golpearme la puerta.

- Dicen que tu hijo se pasea con una ametralladora…
Mentira, el único que tiene ametralladora es Saúl Peña y mientras él estaba preso, se la guardaban sus familiares. Igual, no sé para qué la tiene porque desde que salió de la cárcel; cuando tuvo un problema, salió corriendo


- ¿Quién se tirotea contra quien casi todas las noches?
Ellos son los que viven tirando tiros y molestando. Ahora que mi hijo no está en el barrio… ¿Quién está tirando tiros entonces? Es esta mujer y su gente. Todas las noches se escuchan tiros y por el ruido uno puede saber de donde vienen… son de atrás de la iglesia, por donde andan ellos. Aunque ahora que está caminando Gendarmería pararon un poco.

- Hay fotos de tu hijo con dos armas en la mano…
Esas dos armas y el casco de soldado son de plástico. Las dos pistolas son de balines, no son de verdad. Lo hizo pelotudeando. Encima esas fotos las sacó un amigo de él que lo agarraron entre el Ñoño Peña y unos cuantos mugrosos más, le pegaron mal para sacarle las zapatillas, la campera y el celular donde tenía esas fotos. Después se las llevaron a Carmen. Así es como tienen eso, no como dice ella que se la dejaron en la puerta de la casa. Lo mismo de las pintadas que tienen en las paredes, las escribieron ellos mismos. Miran muchas películas.

- ¿Estás con un policía y por eso nunca te llevan presa?
Jamás, nunca, me meto un tiro acá abajo antes de acostarme con un policía. Así de corta. No soy como ellas que hacen eso. Jamás me van a ver en la esquina hablando con un patrullero como a ellos. El otro día, El Polaco Peña le estaba mostrando la moto a un patrullero y después se quieren hacer los chorros… Ellos hacen todo eso y yo ni los miro… se deben pensar que viven de mi saludo porque en mi barrio ya no hay más chorros… la mayoría están presos.

- ¿Es verdad que El Bebé mató a su padre?
Mi marido muere de un tiro en el estómago mientras estaba sólo en el portón. Pasó un coche y le dispararon. Él comenzó a sentir algo caliente y su hermano Juani lo llevó al hospital pero no lo soportó y murió. Mi hijo era los ojos de mi marido. Era todo para él, no entiendo por qué dicen eso… mi hijo no es la persona que ellos dicen.

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