El Gobierno decretó el duelo nacional por la muerte de Quino

Joaquín Lavado murió ayer a los 88 años. El Gobierno definió una jornada de duelo nacional.

Por medio de un decreto publicado en el Boletín Oficial, el Gobierno declaró el duelo nacional por la muerte de Joaquín Salvador Lavado, conocido como Quino, uno de los dibujantes y artistas gráficos más importantes de la historia argentina, que a mediados de la década del 60 publicó por primera vez la emblemática tira Mafalda, que fue traducida a más de 40 idiomas, dio vuelta al mundo y marcó a millones de personas.

Quino tenía 88 años y según el Gobierno "por su enorme trayectoria debe ser reconocido por el Estado Nacional por todo lo que ha contribuido a nuestra cultura". Nacido en Mendoza en 1932, el artista fue distinguido como "una figura de destacada trayectoria en nuestro país y en el mundo por su labor social, humanista y cultural".

De acuerdo al decreto que declara el duelo nacional, Mafalda es un "personaje icónico de la cultura argentina, en tanto que desde su mirada de niña estimula la reflexión sobre problemas que atraviesan a toda la humanidad y al planeta entero, sin perder de vista su pertenencia local". Además, destacan que "ha sido pionero en problematizar a través del humor temas como la desigualdad de género y el lugar de la mujer en las sociedades patriarcales".

"Su humanismo y los valores que promueve como el respeto por la vida, los derechos humanos y la paz, no solo siguen vigentes sino que se resignifican permanentemente, entendiendo a sus creaciones como instancia de encuentro y unidad entre argentinos y argentinas", destaca el decreto publicado en el Boletín Oficial esta mañana, que lleva la firma del presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Cultura, Tristán Bauer.

"Este Gobierno entiende la importancia del legado cultural que ha dejado Joaquín Salvador Lavado Tejón, "Quino", en los ciudadanos argentinos y en las ciudadanas argentinas", sintetiza, y apunta que "con su humor gráfico ha acompañado el crecimiento de las familias argentinas, compartiendo su obra de generación en generación, cautivando a niños y niñas, despertando el pensamiento crítico entre adolescentes y generando una mirada cómplice con las personas adultas".

"(Quino) ha logrado desarrollar un lenguaje universal, polisémico, con capacidad para interpelar a cualquier ciudadano o ciudadana del mundo, traspasando fronteras y contribuyendo al respeto por la diversidad", afirmó el decreto.


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