¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

De la Sota pasó a retiro obligatorio a 23 policías

El Gobernador firmó los decretos en el marco de una reestructuración de las fuerzas. Quieren evitar un nuevo acuartelamiento.
Sabado, 18 de enero de 2014 a las 09:30
La luz de alarma por un posible acuartelamiento policial en Córdoba finalmente se terminó de apagar ayer. Fue un día después de que el gobierno nacional enviase 1200 efectivos federales de seguridad a la provincia mediterránea, por expreso –y, ahora sí, formal– pedido del gobernador José Manuel de la Sota, y la justicia detuviese a 16 uniformados y a la esposa de un efectivo retirado, supuestos referentes del reclamo corporativo que se inició el pasado 3 y 4 de diciembre. El fiscal Raúl Garzón, que investiga aquel complot policial que derivó en una grave crisis social, ayer no descartó nuevas detenciones y aseguró que el lunes comenzará a tomarles declaración indagatoria a los agentes, quienes están acusados de "desobediencia a la autoridad" e "instigación a cometer delito". En post de erradicar un desacato más en la fuerza, De la Sota ayer continuó con el pase a retiro de policías. Ayer, fueron 23, varios de ellos de alto y mediano rango.

Con el objetivo de reestructurar la fuerza policial provincial que se vio envuelta en sucesivos conflictos en el último tiempo –desde el narcoescándalo al acuartelamiento–, De la Sota ayer decretó el pase a retiro a cinco oficiales superiores, 12 oficiales jefes, tres oficiales subalternos y tres suboficiales. El jueves, otros cinco comisarios mayores habían sido removidos por el gobernador.

En un escueto comunicado, el Ejecutivo provincial indicó que los decretos 25/2014 y 26/2014 "fueron (firmados) en concordancia con la propuesta de la Junta de Promociones y Retiros" de la Policía de Córdoba "a los fines de la reestructuración de la fuerza policial para el presente año".

Un día antes, la justicia había arrestado a 16 policías y a Andrea Rearte, del grupo "Las Rosas Azules" y esposa de un efectivo retirado, todos vinculados al acuartelamiento del 3 y 4 de diciembre, que generó un efecto contagio en todo el país. Los investigadores creen que el nuevo "motín" que se estaba fogoneando en la provincia mediterránea tenía por fin fortalecer las protestas policiales que pretendieron fogonearse, y finalmente fracasaron, en Entre Ríos.

Por tal motivo, el fiscal Garzón aseguró ayer que no descarta nuevos arrestos. De acuerdo al procurador, que dialogó con el portal noticioso Infojus, "los detenidos comenzarán a presentarse el lunes próximo a prestar declaración indagatoria".

Garzón está a cargo de la fiscalía de feria y fue uno de los cuatro procuradores que se encontraba de turno la noche en que, por falta de presencia policial, los saqueos se multiplicaron en las calles cordobesas y un joven fue asesinado.

"Estimo que las indagatorias van a transcurrir a lo largo de toda la semana, ya que en total son 17 (los imputados) y todos ellos tienen derecho a ejercer su derecho a defensa", afirmó el fiscal. Los acusados están apresados en la cárcel de Bouwer, al sur de Córdoba capital, a la espera de ser citados por la justicia.

Andrea Rearte, la única mujer detenida, es vocera de "Las Rosas Azules", el grupo de esposas de los policías que apoyó en la calles las "reivindicaciones" salariales solicitadas por sus maridos. Rearte, quien a su vez es retirada del Servicio Penitenciaro Cordobés, fue apresada el jueves cuando protestaba junto a otras mujeres frente a la Jefatura de Policía local, denunciando al gobierno delasotista de incumplir el acuerdo al que habían llegado sus esposos.

El fiscal la acusa de "entorpecimiento funcional" por bloquear el día del acuartelamiento, junto a otras "rosas azules", la sede de la Guardia de Infantería. "Fue una de las mujeres que obstruyó el ingreso y egreso de los móviles de la Guardia de Infantería", dijo a Infojus. Rearte es esposa de un policía retirado, titular del Sindicato de Policías y Penitenciarios y Afines (Seppa) que reclama su personería en la Corte Suprema de Justicia.

En rechazo a la detención de la vocera de "Las Rosas Azules", una agente del Servicio Penitenciario provincial habría instigado a una revuelta, quien fue pasada a "una situación pasiva" por el Tribunal de Conducta Policial de Córdoba.

Según informó Télam, el ente disciplinario tomó su decisión en el marco de la causa abierta contra otros cuatro efectivos de la fuerza policial por, supuestamente, instigar a una nueva rebelión.

El titular del tribunal, Martín Berrotarán, destacó que la agente fue denunciada por sus propios compañeros, quienes "la escucharon hablando por teléfono cuando decía que, de ser necesario, saldrían a los tiros a defender a Rearte".

En la mañana de ayer, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, coincidió con el ministro de Gobierno y Seguridad de Córdoba, Walter Saieg, al considerar que la situación "está debidamente resuelta".

El funcionario provincial, por su parte, destacó que la policía se comporta con "absoluta normalidad" en toda la provincia y agradeció la presencia preventiva de las fuerzas federales ya que lleva "tranquilidad" a los cordobeses.

Ante este escenario, por la noche, desde el ministerio de Seguridad de la Nación aseguraron a este diario que "la situación en Córdoba está controlada".

Fuente: Tiempo Argentino
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD